El tío la vara, el azote de la tontería nacional, el super héroe surgido de mancha más profunda y castiza, ha vuelto. Fue desterrado por un tiempo pero el mundo le reclama, su destino está ligado al de la humanidad porque debe salvarnos de todas las gilipolleces varias que inundan este mundo. La primera víctima de la ira de su vara fue un personaje demasiado despreciado en los últimos años: el banquero.