Anonadada. Es la palabra que define mi estado al ver estas «pelucas». No entiendo por qué la gente se esfuerza en crear cosas que nadie va a utilizar, porque el diseñador no pensará que estas pelucas con formas de animales se van a poner de moda ¿verdad?.
Como obra de arte puede pasar, tiene mucho mérito crear cabezas de animales moldeando pelo, pero ya. Como mucho pueden tener cabida en alguna exposición o en algún desfile extravagante, vease Jonn Galiano o David Delfín. Pobres modelos, seguro que estaban horrorizadas con una cabra o un conejo en su cabeza. ¡Que horror!