El pasado fin de semana se celebró en las pistas de la estación de Sant Moritz (Suiza) el Campeonato del Mundo de Bobsleigh. Bien, para quién no lo sepa este deporte es una modalidad del descenso en trineo pero mucho más evolucionado y en él equipos de dos o cuatro personas empujan un trineo para luego introducirse en él y dejarse deslizar por una pista.
De acuerdo, pues bien uno de los componentes del equipo permanece en última posición, tras el trineo, para empujarlo. Pues haciendo esta acción ayer se produjo la anécdota de este año y es que los trajes a veces no aguantan todo lo que deben o la talla de esta atleta era demasiado ajustada, porque al agacharse para tomar impulso la costura dijo:» no puedo más», y reventó, dejando al aire los cachetes del culo de la joven y un finisimo hilo de tanga. La chica en cuestión se llama Gillian Cooke, es miembro de la pareja británica y campeona del mundo 2009.
En ese momento ni se dio cuenta y siguió corriendo como si nada, o si se la dió e hizo caso omiso, el caso es que el Bobsleigh desde ayer tiene una nueva musa. Por cierto, con el frío que tiene que hacer en la nieve bien podrían ponerse unas bragas de cuello vuelto en vez de un diminuto tanguita.