Quien se haya emborrachado alguna vez, y suponemos que muchos de vosotros lo habéis hecho alguna vez, sabréis que las percepciones de las cosas que nos rodea cambia y cosas que son de una forma, se ven totalmente diferentes.
El alcohol también nos hace cambiar nuestra forma de actuar, suele darnos valor para hacer cosas que en estado sobrio no haríamos nunca. Esto es lo que podréis ver en este interesante vídeo donde se recogen situaciones vistas desde el lado sobrio y vistas desde el lado opuesto. Situaciones que seguro que a más de uno os resultarán familiares.