Si a muchos de nosotros nos dijeran que cómo vemos nuestro trabajo, muchos coincidiríamos que es como una cárcel o incluso en muchas ocasiones mucho pero que eso por los estrictos controles y prohibiciones que hacen las empresas.
Si ya de por sí es duro pasar 8 o 10 horas en el trabajo, más duro aún es si no te dan cierta libertad y te están controlando continuamente todos tus movimientos, convirtiendo ese tiempo en una auténtica pesadilla
Sobre este tema, os queremos traer las diferencias que podemos encontrar entre la prisión y el trabajo, por medio de la siguiente imagen que os dejamos a continuación.