Esto es lo que se dice tener unos amigos «h.d.p», por decirlo de forma fina ya que estamos en horario infantil. Imaginaos que dais el tremendo tremendisimo paso (al menos para mí) de hacer puenting, y con el susto en el cuerpo y el corazón en la garganta, justo una milesima de segundos después vuestros amigos deciden haceros creer que la cuerda está rota. Qué debería pensar ese hombre mientras caía? Su vida pasaría por delante de sus ojos, claro, hasta el momento en que algo tensa los pies y se da cuenta de que sigue vivo y cogando mientras sus amigos se descojonan.
Alguien debería decirles que el día de los Santos Inocentes ya pasó.
Vía: Desvariando ando…